¿Por cuánto tiempo se hornea la pechuga de pollo congelada?

Las pechugas de pollo congeladas tardan al menos un 50 por ciento más en hornearse que las pechugas de pollo descongeladas. Por ejemplo, una pechuga de pollo descongelada tarda unos 30 minutos en hornear, por lo que una congelada se cocina en unos 45 minutos.

Por razones de seguridad y sabor, es recomendable descongelar las pechugas de pollo antes de cocinarlas. Sin embargo, si los cocineros deben usar pechugas de pollo congeladas, deben asegurarse de hornearlas a una temperatura adecuada, al menos 350 grados. Además, es imprescindible utilizar un termómetro para carnes. Las pechugas de pollo son seguras para comer cuando su temperatura interna alcanza los 165 grados; El proceso de cocción lleva más tiempo con el pollo congelado. Las pechugas de pollo con hueso generalmente toman el doble de tiempo para cocinar que las pechugas de pollo deshuesadas, por lo que las personas que buscan ahorrar tiempo deberían elegir las deshuesadas.

Nunca es recomendable preparar pechugas de pollo congeladas en una olla de barro porque la temperatura no será lo suficientemente alta como para neutralizar las bacterias de salmonela y camphylobacter. Además, cuando cocine pollo congelado, los cocineros deben asegurarse de usar los pechos (o los muslos) en lugar de las aves. Las aves enteras no cocinan uniformemente cuando están congeladas; mientras que la piel puede verse crujiente, el interior puede ser frío como el hielo. Finalmente, los cocineros sabrán que las pechugas de pollo congeladas están listas cuando sus jugos salgan claros, no rosados.