El cerdo está completamente cocido cuando alcanza una temperatura interna entre 145 y 160 grados Fahrenheit. Deben usarse termómetros para carne para encontrar una temperatura precisa.
El cerdo que se cocina a una temperatura interna de 145F será ligeramente rosado, tierno y jugoso. El cerdo que se cocina durante demasiado tiempo se seca y produce un sabor suave.
Cuando prepare carne de cerdo, lávese las manos y las superficies de forma frecuente para evitar la contaminación cruzada. Para prevenir enfermedades transmitidas por los alimentos, el cerdo debe mantenerse separado de otros productos alimenticios.
El cerdo debe descansar por lo menos tres minutos antes de que se sirva. El cerdo sobrante debe ser refrigerado rápidamente.