La leche condensada se daña o se estropea. Para prevenir enfermedades transmitidas por los alimentos, la mejor opción es usar la leche antes de la fecha de caducidad que figura en la lata.
Cuando se almacena correctamente, la leche condensada se puede utilizar durante bastante tiempo. Después de abrir, la leche condensada debe almacenarse en un recipiente hermético en el refrigerador. De esta manera, la leche condensada abierta puede usarse de manera segura hasta 3 semanas después de la apertura. La leche condensada sin abrir debe almacenarse en un lugar fresco y seco, como una despensa, y puede usarse de manera segura hasta por un año. Si la leche se vuelve amarilla o es demasiado espesa para verter, puede echarse a perder.