Las frutas que son conocidas por sus propiedades diuréticas incluyen uvas, sandías y arándanos; este último se puede consumir en forma de baya, jugo o suplemento. Aunque a menudo se clasifican erróneamente como vegetales, los tomates también son frutas con propiedades diuréticas. Algunos alimentos tienen fitoquímicos que los ayudan a causar que los fluidos evacuen el cuerpo más fácilmente, como la cafeína que se encuentra en el café o el cacao.
Un diurético es una sustancia que funciona para limpiar el exceso de líquidos del cuerpo para ayudar a que uno se sienta menos hinchado. La retención de agua dentro del cuerpo generalmente es causada por demasiada sal en el cuerpo. Comer alimentos con propiedades diuréticas puede hacer que el cuerpo extraiga agua de las células y tejidos del cuerpo y la lleve a la vejiga donde el cuerpo puede expulsarla. El consumo de alimentos para combatir la retención de agua permite el tratamiento natural de los líquidos en exceso que pueden causar hinchazón del cuerpo y edema.
Hay una variedad de diuréticos disponibles en el mercado que requieren una receta, pero las frutas y otros alimentos son a veces diuréticos naturales que funcionan sin ninguna intervención farmacéutica y se pueden agregar fácilmente a la dieta habitual. Además de las frutas mencionadas anteriormente, hay una gran variedad de verduras que también tienen propiedades diuréticas, como berenjena, alcachofa, apio, zanahorias y espárragos.