Las seis clasificaciones de nutrientes son proteínas, carbohidratos, grasas, vitaminas y minerales. El agua también se clasifica como un nutriente. Estos nutrientes son esenciales para la supervivencia; el cuerpo humano no puede funcionar sin ellos.
El agua se encuentra en las bebidas y en los alimentos con alto contenido de humedad, como las frutas y verduras. Representa la mayor parte del peso del cuerpo humano y ayuda al cuerpo a funcionar mediante el transporte de nutrientes y la eliminación de desechos. La cantidad recomendada de agua para el adulto promedio varía según el nivel de actividad y el entorno.
La proteína proviene principalmente de productos animales como la carne, los huevos y la leche. Ayuda a construir y reparar células. Las fuentes de carbohidratos incluyen frutas, verduras, pan y pasta. Los carbohidratos proporcionan energía al cerebro y al cuerpo. Si no se consumen suficientes carbohidratos, el cuerpo utiliza proteínas para obtener energía. Las fuentes de grasa incluyen productos de origen animal, aceites y nueces. La grasa proporciona energía y ayuda al cuerpo a descomponer ciertas vitaminas. También protege los órganos y mantiene el calor en el cuerpo.
Las vitaminas se pueden consumir en suplementos o a través de los alimentos, aunque ciertos alimentos contienen diferentes vitaminas. Cada uno de los 13 tipos diferentes de vitamina realiza su propia función en el cuerpo. Los minerales también vienen en forma de alimentos o suplementos. Los ejemplos de minerales incluyen sodio, calcio y potasio.