El romero con jugo de limón puede usarse como sustituto de las bayas de enebro cuando se cocina. Tanto las bayas de enebro como el romero tienen un sabor similar al de un pino. Las bayas de enebro tienen un sabor más cítrico que el romero, por lo que es necesario agregar jugo de limón al romero para compensar esta diferencia de sabor.
Las bayas de enebro se usan a menudo para condimentar carnes, como cordero, venado, jabalí y cerdo. Las bayas de enebro son también el ingrediente saborizante clave en la ginebra. Las bayas de enebro no son en realidad bayas. Son, de hecho, los pequeños conos del arbusto de enebro. No todas las bayas de enebro son comestibles, por lo que es mejor no recogerlas en la naturaleza.