La hamburguesa cocida debe refrigerarse dentro de las dos horas posteriores a la cocción. Cualquier hamburguesa cocida u otro alimento perecedero que se haya dejado a temperatura ambiente durante más de dos horas debe ser descartado.
Seguir las recomendaciones de seguridad alimentaria es importante para prevenir las enfermedades transmitidas por los alimentos. Todas las formas de carne molida, incluyendo la hamburguesa y la carne molida de res, el cordero o la ternera, deben cocinarse a una temperatura interna de 160 ° F. Una vez que se cocinan los alimentos, se deben mantener a una temperatura de 140 ° F o más. Esto evita que los alimentos entren en lo que se considera la "zona de peligro", un rango de temperatura entre 40 y 140 F. Las bacterias crecen rápidamente en los alimentos en este rango de temperatura y, por lo tanto, deben evitarse.
