Una de las diferencias entre la sal del mar celta, que se recolecta en la costa de Bretaña, Francia, y la sal de cristal del Himalaya, que se cosecha a 5,000 pies debajo de las montañas del Himalaya, es el color. Mientras que la sal celta del mar es de color gris, la sal del Himalaya es de color rosa. Además del cloruro de sodio, la sal del mar celta contiene trazas de calcio, magnesio, potasio, hierro y zinc, mientras que la sal del Himalaya contiene 84 elementos que se encuentran en el cuerpo.
La diferencia más obvia entre la sal de mar celta y la sal de cristal del Himalaya es el color. Debido a que la sal del mar celta se cosecha en campos costeros bordeados de arcilla natural y arena, es gris. La arcilla también probablemente explica sus rastros de hierro y zinc.
Esta sal también es única porque retiene la humedad y se siente ligeramente húmeda al tacto. Aunque la sal del Himalaya se extrae en tierra firme, parte de su folklore afirma que se ha fosilizado de los restos del mar original. Esto puede explicar su color rosado y contenido nutricional.
Las comparaciones nutricionales de estas dos sales muestran que la sal marina celta es más baja en sodio y más alta en magnesio, fósforo y potasio que la sal del Himalaya. Sin embargo, la sal del Himalaya contiene considerablemente más elementos en estado iónico. Además, la sal del Himalaya fosilizada se considera una de las más puras, mientras que la sal celta se llama "fresca".