El tomate también se conoce como la manzana del amor. Cuando los tomates, que son nativos del Nuevo Mundo, fueron traídos a Europa en el siglo XVI, al principio se los consideró venenosos. Con el paso del tiempo, los atributos supuestamente venenosos de la fruta comenzaron a vincularse con supuestas cualidades afrodisíacas.
Otra teoría sobre cómo el tomate obtuvo su apodo es su asociación con los moros, que gobernaron España por un tiempo. Cuando los moros finalmente regresaron a Marruecos, trajeron el tomate con ellos. La fruta entonces se conocía como la pomi dei mori, o la fruta de los moros.
Es posible que los franceses malinterpreten esto y comiencen a llamar al tomate pomme d'amour o manzana de amor.
