Desde un punto de vista científico, un tomate es una fruta, pero se trata como un vegetal en la cocina. Biológicamente, los tomates se desarrollan de manera similar a muchas frutas, pero los cocineros las usan como verduras en los platos que no son dulces.
Los tomates se desarrollan a partir del ovario de la planta, que se encuentra en la flor. En la maduración, contienen semillas, al igual que otras frutas. A su vez, bajo las condiciones correctas, estas semillas producen otras plantas. Las verduras no se desarrollan a partir del ovario de una planta, sino que son porciones comestibles de esa planta que, por sí mismas, no producen otras plantas. Botánicamente, el tomate está en el grupo de frutas de la baya.