Las manzanas flotan porque su densidad general es menor que la del agua. Su densidad es menor que el agua porque el 25 por ciento del volumen de una manzana es aire.
Los objetos que son menos densos que el agua flotan cuando se ponen en el agua, mientras que los objetos que son más densos que el agua se hunden cuando se ponen en el agua. De acuerdo con el Principio de Arquímedes, "un cuerpo sumergido en un fluido es impulsado por una fuerza igual al peso del fluido desplazado". Las bolsas de aire entre las celdas de una manzana permiten que se capture suficiente aire dentro de la manzana para crear una densidad general menor que la del agua.