El queso ricotta vendido en los Estados Unidos se somete al proceso de pasteurización antes de colocarlo en los estantes de las tiendas. Es muy raro encontrar queso ricotta sin pasteurizar en el supermercado, aunque los consumidores pueden buscar en línea o hacer solicitudes directamente a queserías especializadas en quesos sin pasteurizar.
La pasteurización es el proceso de calentar rápidamente la temperatura de la leche para destruir las bacterias activas. En países distintos de los Estados Unidos, muchos quesos blandos como la ricota o el requesón no se someten al proceso de pasteurización.
El queso ricotta es rico en proteínas y calcio, y cuando se elabora con una combinación de leches enteras y sin grasa, no tiene un contenido excesivamente alto de grasa. El proceso de pasteurización hace que el queso ricotta sea seguro para el consumo de las mujeres embarazadas.