La mejor manera de hacer té de comino es comprarlo en forma de semilla, hervir las semillas en agua y dejarlas reposar durante 8-10 minutos. Para resaltar todo el sabor y la potencia del Semillas, asarlas ligeramente antes de hervir y remojar.
Las semillas también se pueden agregar a los alimentos, por lo que no se desperdiciarán incluso si a alguien no le gusta el té en sí. Hay muchos beneficios para la salud de beber té de comino, pero uno de los más importantes es que ayuda con la digestión. Según la Fundación George Mateljan, también puede actuar como diurético y ayudar con la hinchazón. Además, los estudios han demostrado que el comino ayudó a prevenir que los animales de laboratorio desarrollen tumores en el estómago o el hígado, por lo que posiblemente puede ayudar a prevenir ciertos tipos de cáncer.