El coco se puede considerar una fruta o una nuez, aunque se conoce comúnmente como drupa. Una drupa es una fruta con una cubierta protectora resistente, como el melocotón o la aceituna. Todas las drupas tienen tres capas: el exocarpio, el mesocarpio y el endocarpio.
El exocarpio, que es la capa más externa, es carnoso, mientras que el mesocarpio, o capa intermedia, es fibroso. El endocarpio envuelve directamente la semilla y es muy duro y duradero. Los cocos son drupas particularmente versátiles, ya que algunas de ellas se pueden usar como alimento, combustible o como materiales constructivos. En la Segunda Guerra Mundial, el agua de coco se usó por vía intravenosa cuando la solución salina no estaba disponible.