La trituración de un calabacín se puede hacer a mano con un rallador en menos de 5 minutos. Si está buscando un método aún más rápido, puede triturar el calabacín con la ayuda de un procesador de alimentos.
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Prepare el calabacín y los materiales
Para comenzar, lave el calabacín con agua corriente fría y corte el tallo con un cuchillo. Se recomienda usar un rallador en forma de cono con remaches de tamaño mediano, ya que esta trituradora se puede colocar en una superficie estable. Si usa un procesador de alimentos, corte el calabacín por la mitad y saque las semillas antes de triturar.
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Triture el calabacín
Al triturar el calabacín, comience poniendo el extremo cortado en el rallador. Ejecutar el calabacín por los remaches para triturar. Continúa haciendo esto hasta que alcances el núcleo sembrado. Corte alrededor del núcleo de la semilla para eliminarlo, y continúe rallando el calabacín hasta que el núcleo aparezca nuevamente. Cortar el núcleo de la semilla una vez más, y continuar triturando. Continúa este proceso hasta que todo el calabacín esté rallado. Si usa un procesador de alimentos, inserte las mitades de calabacín en la rampa para el pie y luego procese.
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Guarde el calabacín rallado
El calabacín tiene un alto contenido de agua, así que seque los trozos lo más posible con toallas de cocina antes de usarlos en una receta. Si no piensa utilizar el calabacín de inmediato, colóquelo en una bolsa de plástico hermética y coloque la bolsa en el congelador.