Las castañas de caballo contienen esculina, que es un tipo de veneno. Estas nueces pueden causar la muerte cuando se consumen crudas, de acuerdo con los Institutos Nacionales de la Salud.
La Administración de Drogas y Alimentos de los EE. UU. considera que la castaña entera es una hierba insegura. Consumir las nueces o tomar un té hecho de hojas de castaño de indias puede llevar a la intoxicación por castaño de indias. Dicha toxicidad puede llevar a la muerte, aunque es más probable que los individuos experimenten efectos secundarios como salivación, náuseas, vómitos, diarrea, dolores de cabeza, convulsiones, una degradación de los glóbulos rojos junto con insuficiencia respiratoria y circulatoria. Cuando se preparan adecuadamente, los productos de castaño de indias son seguros de consumir. Este proceso generalmente involucra formulaciones de extracto estandarizadas para eliminar la esculina, el componente más tóxico.
