A medida que el agua alcalina crece en popularidad, cada vez hay más tiendas especializadas, tiendas de alimentos saludables y supermercados. Otras instalaciones que venden agua alcalina incluyen gimnasios, spas u otros lugares que promueven la salud y el bienestar integral.
Aunque el agua alcalina está disponible en forma embotellada, también es posible comprar máquinas que conviertan el agua del grifo en agua alcalina. Sin embargo, los expertos advierten contra la compra de agua alcalina almacenada en botellas de plástico. Las botellas de plástico contienen agentes carcinógenos que el agua alcalina puede desprender del plástico. Además, existe cierto debate sobre la vida útil del agua alcalina. Es posible que el agua alcalina embotellada que permanece en un estante durante varias semanas ya no contenga las mismas cualidades que el agua alcalina fresca de una máquina o filtro de grifo.
Los defensores del agua alcalina sostienen que equilibra las hormonas, alivia la artritis, cura las enfermedades, elimina el reflujo ácido, ayuda al cuerpo a digerir mejor los alimentos y mejora el cáncer, aunque muchas de estas afirmaciones aún no han sido verificadas médicamente. La teoría detrás del consumo de agua alcalina es que las dietas pobres crean un desequilibrio automático de ácido en el cuerpo. El consumo de agua alcalina, que es un antioxidante natural, ayuda al cuerpo a optimizarse. Los altos niveles de oxígeno en el agua alcalina también lo hacen ideal para aquellos que sufren de deficiencia de oxígeno. Aunque los altos niveles alcalinos en el agua alcalina se crean típicamente de manera artificial, el agua alcalina también se encuentra en la naturaleza.