Dependiendo del tamaño, las papas deben hornearse en el horno durante unos 50 minutos a 1 hora. Agitar las papas cada 20 minutos durante el proceso de cocción ayuda a garantizar una cocción consistente en toda la papa.
Antes de hornear papas, precaliente el horno a 425 grados Fahrenheit. Frote bien las papas con agua corriente y luego séquelas con una toalla o una toalla de papel. Use un cuchillo de pelar para recortar cualquier defecto.
Frote las papas con aceite vegetal, utilizando un pincel de repostería si lo desea. Espolvoree sal y pimienta negra molida en todos los lados de la papa. Usa los dientes de un tenedor para hacer algunos pinchazos en las patatas; esto permite que el vapor se escape durante la cocción.
Coloque las papas directamente en la rejilla o en una bandeja para hornear forrada con papel de aluminio. Permítales hornear por hasta una hora. Perforar las papas con un tenedor para probar la cocción. Las papas deben sentirse suaves cuando se perforan, y su piel estará seca.
Para acelerar el tiempo de horneado, hornee las papas en el microondas durante unos 5 minutos antes de ponerlas en el horno. Envoltorios de papel de aluminio en cada papa pueden dejar las papas con pieles más suaves, si se desea.
Las papas Russet son generalmente preferidas para hornear porque tienen una piel gruesa, textura esponjosa y sabor dulce cuando se hornean.