La forma más fácil de arreglar demasiado orégano en una salsa es agregarle más líquido para diluir el sabor del orégano. Esta simple solución aumenta el volumen de la salsa, minimizando el efecto del Orégano y guardando la salsa en el proceso.
Usar la prueba y error para determinar cuánto líquido adicional agregar es la mejor manera de obtener el sabor deseado en una salsa. Comience por agregar un poco de líquido y pruebe la salsa antes de agregar más para asegurarse de que la salsa no se vuelva demasiado acuosa. Si simplemente agregar más líquido no es una opción debido al tamaño de la olla o la cantidad requerida necesaria para la receta, es posible eliminar un poco de la salsa y reemplazarla con más líquido para mantener bajo control las proporciones adecuadas. Al diluir las salsas, el agua y el caldo de pollo, las salsas delgadas, mientras que otros líquidos, como la salsa de tomate, espesan la salsa.
Agregar elementos adicionales a la salsa también puede aumentar el volumen de la salsa y luego minimizar el sabor del orégano. Dependiendo del tipo de salsa, las adiciones pueden incluir cebollas, pimientos verdes o rojos, carne molida o pavo, o un queso rallado sabroso, como el romano o el queso parmesano.