Mercurio tiene un gran núcleo metálico con una corteza rocosa relativamente delgada y un manto que tiene una gran abundancia de azufre y potasio. Su campo magnético está descentrado, lo que indica que su estructura interna es compleja e inusual. Después de la Tierra, es el segundo planeta más denso del sistema solar.
El mercurio no tiene una atmósfera, pero sí tiene gases que lo rodean en lo que se conoce como su exosfera. Esto es producido por el viento solar que elimina los átomos de la superficie de Mercurio y los envía al espacio, donde chocan con diminutos meteoroides. Esto hace que Mercurio tenga una cola similar a un cometa.