Durante el período de recuperación después de una litotricia, un procedimiento que rompe los cálculos renales mediante ondas de choque, los pacientes pueden esperar ver pequeñas cantidades de sangre en la orina. También es normal experimentar náuseas o dolor al pasar los fragmentos de piedra, según MedlinePlus.
La litotricia extracorpórea por ondas de choque, también conocida como litotricia o ESWL, es un tratamiento común y efectivo para los cálculos renales, y la mayoría de los pacientes pueden reanudar sus actividades normales en uno o dos días, dice WebMD. El procedimiento dura aproximadamente una hora y se realiza con sedantes o anestesia local. Es un procedimiento ambulatorio y no requiere hospitalización.
Después de un procedimiento de litotricia, se le puede pedir a un paciente que se esfuerce la orina y recoja cualquier fragmento de piedra que pase, dice MedlinePlus. Es normal experimentar algo de dolor cuando estos fragmentos salen del sistema urinario, pero si un paciente experimenta dolor intenso o pasa una cantidad significativa de sangre, debe informar a su médico.
Un flujo de orina bloqueado debido a que no se puede pasar un fragmento más grande puede requerir un procedimiento de seguimiento en el que se usa un utereoscopio para desalojar el fragmento, dice WebMD. Otra posible complicación es la infección del tracto urinario. La atención de seguimiento incluye tomar analgésicos y antibióticos, beber mucha agua para eliminar los desechos de las piedras del sistema y realizar cambios en el estilo de vida para prevenir el retorno de los cálculos renales, señala MedlinePlus.