Los pacientes con problemas hepáticos deben evitar o limitar el consumo de sodio, líquidos y alcohol, de acuerdo con Drugs.com. Los alimentos ricos en sodio incluyen sal de mesa, sopas, cenas congeladas, bocadillos empacados y verduras enlatadas. Las carnes frías, salchichas, tocino y salsas teriyaki también contienen altas cantidades de sodio.
Una dieta baja en sodio es aconsejable para los pacientes cuyos cuerpos retienen líquidos, lo que causa hinchazón, afirma Drugs.com. También ayuda a reducir la ingesta de líquidos, incluidos el agua, los jugos, los refrescos y la leche. También es importante limitar el consumo de gelatina, paletas heladas y sopas.
Una dieta para la enfermedad del hígado le permite al paciente obtener los nutrientes adecuados para controlar los síntomas de la enfermedad, explica Drugs.com. Los médicos recomiendan comer diferentes tipos de alimentos y mantener un peso saludable. También sugieren comer de cuatro a seis comidas pequeñas con cantidades suficientes de proteínas y carbohidratos cada día. Un huevo grande, una taza de leche y 3 onzas de pescado, pollo, pavo o cerdo son buenas fuentes de proteínas, mientras que los granos, cereales, pastas y pan son ricos en carbohidratos.
Antes de restringir o evitar la ingesta de ciertos alimentos, es esencial consultar a un dietista, ya que la dieta adecuada para un paciente con enfermedad hepática depende del tipo de enfermedad y la presencia de otras afecciones médicas, señala Drugs.com. Aquellos que no logran mantener una dieta para la enfermedad hepática pueden experimentar síntomas agravantes o desarrollar complicaciones.