Las glándulas en el cuello se inflaman cuando el paciente sufre una infección bacteriana como la amigdalitis o la faringitis estreptocócica, cuando hay una infección en los dientes o llagas en la boca, y como resultado de infecciones virales como la mononucleosis, explica WebMD. Las glándulas inflamadas en el cuello, detrás de las orejas o en la parte inferior de la parte posterior de la cabeza se producen cuando las infecciones de la piel y el oído están prosperando.
Algunos pacientes experimentan glándulas inflamadas como un efecto secundario de los medicamentos o una vacuna, según WebMD. Ciertas enfermedades de transmisión sexual, cánceres y trastornos del sistema inmunológico causan que las glándulas se inflamen en el cuello.
Las glándulas inflamadas o los ganglios linfáticos son una señal de que existe inflamación o una infección en el cuerpo, explica WebMD. Los pacientes a menudo notan dolor o sensibilidad al presionar el cuello, así como un dolor de garganta, llagas en la boca o fiebre. Los síntomas adicionales incluyen un bulto visible en el cuello o piel enrojecida, inflamada y caliente sobre el área afectada. Las glándulas inflamadas que son duras, no causan dolor y no se mueven, necesitan la evaluación de un profesional médico.
Los tratamientos comunes para las glándulas inflamadas incluyen aplicar una toallita húmeda y tibia al cuello, descansar para recuperarse de la causa subyacente de las glándulas inflamadas y tomar medicamentos inflamatorios no esteroideos, explica WebMD.