El cerebro está formado principalmente por neuronas o células nerviosas, vasos sanguíneos y células gliales. Las células gliales crean una estructura de soporte para el cerebro. El cerebro tiene un 60 por ciento de grasa.
Hay cuatro tipos de células gliales: oligodendrocitos, astrocitos, células ependimales y microglia. Protegen el cerebro evitando patógenos y toxinas.
Las neuronas y las fibras que las rodean son materia gris. Los haces de fibras de axones son de materia blanca. Los axones son fibras nerviosas únicas a través de las cuales las células nerviosas envían impulsos. Los axones generalmente están encerrados en una vaina de grasa llamada mielina. Las células de oligodendrocitos son responsables de la mielina.
La materia gris del cerebro se encuentra en el núcleo de la médula espinal y llega hasta el tronco cerebral en la parte inferior del cerebro. La materia blanca envuelve la materia gris en la médula espinal y el tallo cerebral, mientras que la materia gris rodea la materia blanca en las partes superiores del cerebro. Las conexiones entre las células en la materia gris permiten al cerebro interpretar las señales de los órganos sensoriales y planificar cómo responder a ellas. La materia blanca sirve como red de comunicación entre diferentes partes del cerebro y entre el cerebro y la médula espinal.