Los científicos aún no comprenden exactamente qué causa el dolor muscular, pero es probable que resulte de la combinación de fibras musculares estiradas o rotas, hinchazón y acumulación de ácido láctico. Aunque el ácido láctico juega un papel importante El dolor muscular y el dolor que sigue al ejercicio, no es la única causa como se pensó durante décadas. El dolor no está correlacionado con el grado de ejercicio realizado o con el aumento de la fuerza.
El ácido láctico es un subproducto de la fermentación láctica, y los músculos utilizan el proceso para impulsar los músculos cuando el animal no puede suministrar suficiente oxígeno a los músculos. La fermentación láctica ácida es un proceso anaeróbico, y aunque no es tan eficiente como el metabolismo oxidativo, puede mantener los músculos en funcionamiento mucho tiempo después de que un organismo sufra una deuda de oxígeno.
Cada vez que los músculos trabajan duro, incurren en lágrimas muy pequeñas. Esto es normal, y parte de la estrategia de crecimiento del cuerpo. Cuando los músculos se desgarran, el cuerpo los reconstruye con más fuerza de lo que eran originalmente. Así es como el entrenamiento de resistencia hace que los músculos crezcan.
Después del ejercicio, muchas personas experimentan hinchazón en los músculos que usaron. Las pruebas en la década de 1980 vincularon la inflamación con el dolor, pero solo se probaron algunas formas de ejercicio en el estudio.