El carbón fue importante para la Revolución Industrial porque se quemó más que el carbón de madera. El calor adicional era necesario en las calderas que funcionaban con las máquinas de vapor desarrolladas durante la Revolución Industrial, según el Departamento de Energía de los Estados Unidos. La misma fuente señala que el carbón se convirtió en el proveedor global de energía dominante durante este tiempo.
El uso principal del carbón durante la Revolución Industrial fue para propulsar barcos de vapor y trenes con motor de vapor, que eran el principal medio de transporte de personas y mercancías, según el Departamento de Energía de los Estados Unidos. El carbón también se usaba para impulsar los motores en las fábricas, lo que ayudó a aumentar la productividad entre los trabajadores estadounidenses, señala la Historia de la enseñanza. Según la misma fuente, las minas de carbón se hicieron frecuentes en Virginia, Pennsylvania y otros lugares en el norte de los Estados Unidos en la década de 1830. La minería del carbón se convirtió en un gran negocio durante la Revolución Industrial debido a las grandes cantidades de carbón necesarias para hacer funcionar las máquinas de vapor. Antes de la introducción de los motores de vapor a carbón, muchos motores funcionaban con agua y leña. Enseñanza de la historia explica que, además de utilizarse en actividades industriales, el carbón y otros combustibles fósiles derivados del carbón comenzaron a utilizarse en los hogares estadounidenses para cocinar, calefacción y electricidad.