En general, está bien usar un producto para el cuidado de la piel después de su fecha de caducidad. Sin embargo, si está bien depende de ciertas condiciones, incluida la cantidad de tiempo que ha pasado, la temperatura en que se almacenó y Los ingredientes del producto, explica Skinacea.com.
Si el producto se almacenó a una temperatura inferior a la ideal, no lo use. Si contiene vitamina C o es protector solar, el producto no será tan efectivo. Si el producto se dispensa no a través de una bomba, sino con el uso de los dedos, es posible que se hayan acumulado bacterias, en cuyo caso, deséchelo. Skinacea.com explica que, en última instancia, verifique si el producto parece sospechoso, lea las etiquetas del empaque o comuníquese con su dermatólogo para obtener más información.