En un examen de urología, el urólogo obtiene el historial médico del paciente y luego realiza exámenes físicos y especializados, de acuerdo con HealthCentral. Las prácticas específicas varían entre los médicos.
En un examen de urología, el paciente completa el papeleo que ayuda al médico a evaluar la gravedad del problema médico, según North Shore-LIJ. El urólogo solicita al paciente información detallada sobre su historial médico, incluido el problema médico que debe abordarse y los medicamentos de la patente. El paciente normalmente debe proporcionar una muestra de orina.
El urólogo realiza un examen físico, concentrándose en el sistema genitourinario, y examina los genitales y el recto para evaluar el estado de la próstata, informa North Shore-LIJ. Después del examen físico, el urólogo recomienda un plan de tratamiento para el paciente. El urólogo puede ordenar pruebas especializadas adicionales para una visita posterior para medir los recuentos sanguíneos, la función renal y los niveles de antígeno prostático específico y de testosterona. El médico también puede solicitar una ecografía o imágenes de los riñones, la vejiga y la próstata.
A veces, el urólogo recomienda procedimientos mínimamente invasivos que el paciente puede realizar en el consultorio del médico, informa HealthCentral. Estos incluyen una cistoscopia, que evalúa la vejiga y la uretra; urodinámica para evaluar la función de la vejiga en pacientes con incontinencia; y una biopsia.