Los órganos vitales son el cerebro, el corazón, los pulmones, el hígado y los riñones. Estos son órganos sin los cuales una persona no podría vivir si uno o los dos se eliminaran por completo.
Aunque estos órganos son necesarios para sobrevivir, las personas pueden vivir con un pulmón y un riñón y solo una parte de su hígado. El hígado es el único órgano que puede regenerarse completamente. El corazón es el órgano que mantiene la sangre y su carga de oxígeno y nutrientes circulando por todo el cuerpo. Los pulmones permiten que el cuerpo respire. El hígado y los riñones eliminan toxinas. El cerebro controla todas estas funciones y más.