De acuerdo con Yoga Journal, la práctica regular de yoga mejora la flexibilidad, aumenta la fuerza muscular, mejora la flexibilidad de las articulaciones y estimula el flujo sanguíneo saludable. El yoga se estira y las posturas también fomentan el drenaje linfático saludable, lo que ayuda a aumentar la inmunidad. Debido a que el yoga mejora la salud cardiovascular, la práctica continua de yoga puede ayudar a disminuir el riesgo de ataque cardíaco.
La revista Self explica que además de los beneficios físicos, la práctica del yoga también ayuda a estimular las emociones positivas en las personas que practican regularmente. Una hora de posturas de yoga eleva los niveles de GABA, una sustancia química en el cerebro que está vinculada a la depresión cuando los niveles son bajos.
Según la Clínica Mayo, la práctica regular de yoga ayuda a minimizar el estrés y promover la relajación. El yoga combina ejercicios de estiramiento saludables con respiración controlada. Está diseñado para enseñar a las personas que al controlar su respiración, pueden a su vez controlar sus cuerpos y liberar la ansiedad calmando la mente. Además de aumentar la inmunidad y promover la salud del corazón, la práctica continua de yoga también puede ayudar a las personas que sufren de depresión y trastornos del sueño.
La Clínica Mayo agrega que es importante que las personas interesadas en practicar yoga consulten con un médico si tienen hernias, osteoporosis severa, coágulos de sangre, afecciones oculares o hipotiroidismo.