El recambio de proteínas se refiere a la degradación de las proteínas a lo largo del tiempo. Refleja el equilibrio entre la síntesis de proteínas de una célula y la degradación de las proteínas. Este factor determina la concentración de una proteína existente dentro de una célula.
Cuando hay un mayor grado de síntesis de proteínas que la degradación que se produce en un organismo, crea un estado anabólico que genera tejido magro. Lo inverso es un estado catabólico en el que un mayor grado de descomposición de las proteínas quema los tejidos magros.
Se cree que el proceso de envejecimiento está relacionado con el recambio de proteínas y la acumulación de proteínas dañadas dentro del cuerpo. Los estudios sobre el recambio de proteínas han demostrado que algunas proteínas son de corta duración, mientras que otras duran mucho más. Las proteínas de larga duración son aquellas que comprenden la mayoría de las proteínas dentro de una célula, mientras que las de corta duración suelen ser las asociadas con funciones reguladoras o proteínas anormales que son más propensas a la degradación.