La ampicilina es un antibiótico que actúa al interrumpir la formación de la pared celular bacteriana durante el crecimiento, de acuerdo con Drugs.com. Esto debilita la pared celular y la rompe, matando a las bacterias.
La ampicilina trata una variedad de infecciones bacterianas, como neumonía, bronquitis e infecciones que afectan la piel, los oídos, los pulmones y el tracto urinario, afirma MedlinePlus. Está disponible en cápsulas, gotas líquidas y pediátricas. La ampicilina generalmente se toma cada seis horas, al menos una hora antes o dos horas después de una comida.
Es importante para pacientes con antecedentes de enfermedad renal, hepática o sanguínea; alergias asma; fiebre de heno; o colitis y otros problemas estomacales para notificar a su médico antes de tomar ampicilina, según MedlinePlus. También se recomienda a los pacientes que informen a su médico acerca de otros medicamentos que toman, especialmente anticoagulantes, píldoras anticonceptivas, vitaminas y otros antibióticos, ya que estos medicamentos a veces interactúan con la ampicilina.
Los efectos secundarios potenciales de la ampicilina incluyen vómitos, diarrea, malestar estomacal y erupción cutánea leve, afirma MedlinePlus. Se recomienda informar estos efectos secundarios a un médico solo si son graves o no se alivian. Los efectos secundarios graves que justifican una consulta inmediata con un médico incluyen erupción cutánea severa, picazón, urticaria, sibilancias y problemas para respirar o tragar.