Algunos de los alimentos ricos en progesterona incluyen verduras de hoja verde oscura, como coles, espinacas o col rizada. Otros con niveles altos de progesterona son las almendras, nueces, frijoles, carne magra, huevos, mariscos. Plátanos, cereales fortificados, papas, calabaza, sandía, semillas de calabaza, leche, carne de pollo y melaza.
Los alimentos ricos en progesterona ayudan al cuerpo femenino a regular el ciclo menstrual, aumentar la fertilidad y mantener el embarazo durante un período de nueve meses. El cuerpo de una mujer sana requiere una ingesta adecuada de alimentos ricos en vitamina B6 para producir suficiente progesterona. Los alimentos ricos en vitamina B6 incluyen nueces, carne de pollo, pavo, mariscos, bananas, frijoles, espinacas, cereales fortificados, frijoles de soya, hígado, pescado, leche de soya y papas. El zinc es otro mineral importante requerido por el cuerpo para producir la hormona progesterona. El zinc trabaja en las glándulas pituitarias para estimular la liberación de progesterona. Algunos de los alimentos ricos en esta hormona son los mariscos, el chocolate negro, el germen de trigo, la calabaza, la sandía, las semillas de calabaza, el ñame, los cangrejos y los garbanzos.
La ingesta de magnesio también aumenta los niveles de progesterona en el cuerpo de una mujer. El magnesio ayuda a restablecer el equilibrio hormonal en el cuerpo, aumentando así la producción de progesterona. Los alimentos ricos en magnesio incluyen frijoles negros, espinacas, col rizada, zanahorias, maíz, otros tipos de cereales fortificados, tofu, caballa, perejil, nueces, okra, calabaza, plátano crudo y semillas de calabaza.
Los alimentos ricos en vitamina C también son efectivos en la producción de progesterona en el cuerpo. Los ejemplos de alimentos ricos en vitamina C incluyen pimientos, frutas cítricas como naranjas y manzanas, guisantes, brócoli y vegetales de hojas oscuras.