Las personas que intentan reducir sus niveles de colesterol LDL malo deben evitar los alimentos que contienen grasas trans y grasas saturadas. Estos incluyen alimentos como la mantequilla, las carnes con grasa, los huevos, la leche, el aceite de coco y el aceite de palma.
No todo el colesterol es malo. Hay dos tipos principales de colesterol: colesterol LDL y HDL. El colesterol LDL es dañino y contribuye a obstruir las arterias, según la Escuela de Medicina de Harvard. El colesterol HDL puede ser beneficioso, ya que ayuda a prevenir que el colesterol LDL se acumule en las arterias. Los niveles altos de colesterol generalmente se refieren a niveles altos de LDL, que pueden causar daños a largo plazo.
La dieta es una forma útil de combatir el colesterol LDL alto. Las personas pueden reducir este colesterol malo al evitar o reducir los alimentos que aumentan el LDL y comer más alimentos que lo reduzcan.
Las grasas trans pueden aumentar los niveles de LDL y reducir los niveles de HDL. La American Heart Association recomienda limitar el consumo de grasas trans a un máximo del 1 por ciento de la ingesta calórica diaria total. Las grasas trans pueden ir por otros nombres, como el aceite parcialmente hidrogenado. No se encuentra en alimentos integrales, ya que es un producto del procesamiento de aceites líquidos en sólidos. Los alimentos que contienen grasas trans incluyen comida rápida, alimentos fritos, pasteles empacados, galletas procesadas y otros alimentos procesados.
Las grasas saturadas también pueden aumentar las LDL en el cuerpo. Para reducir las LDL, la American Heart Association recomienda limitar el consumo de grasas saturadas a un máximo de 5 o 6 por ciento de la ingesta calórica diaria total. Las grasas saturadas provienen de las grasas animales. Las carnes rojas, los productos lácteos, el aceite de palma, el aceite de coco, la piel de aves de corral y los huevos son fuentes altas de grasas saturadas.
Los alimentos que ayudan a reducir las LDL en el cuerpo incluyen pescados grasos, nueces y aceites vegetales, que son ricos en grasas no saturadas, así como soya, avena, frijoles, fresas, manzanas y berenjenas.