En raras ocasiones, un niño y una niña pueden ser gemelos idénticos. Esta afección, llamada síndrome de Turner, afecta a muy pocos pares de gemelos. La diferencia de género ocurre cuando un óvulo y un par de espermatozoides que comienzan como dos machos, pierden una copia de su cromosoma Y dominante cuando se divide.
Un niño y una niña gemelos pueden ser idénticos, según un estudio encontrado en NCBI, aunque esta situación es muy rara. Por lo general, los gemelos idénticos comparten el mismo género: son parejas o niños o niñas. Sin embargo, en raras ocasiones, los gemelos idénticos se forman a partir de un óvulo y un espermatozoide que comienzan como machos (compartiendo cromosomas XY) y luego se convierten en un par de machos y hembras. Esto ocurre cuando la mitad del huevo fertilizado dividido pierde una copia de su cromosoma Y codificado genéticamente. Este error generalmente ocurre temprano en el embarazo. Los bebés que se forman incluyen un varón definido, que tiene los cromosomas XY necesarios para crear los sistemas y rasgos reproductivos masculinos, y una mujer con cromosomas XO. Aunque categorizada como femenina, la niña en la pareja de dos sexos exhibe rasgos externos del género femenino pero tiene solo una copia del cromosoma X, en lugar del cromosoma XX utilizado por los biólogos para clasificar a las hembras como tales. Además, la niña a menudo carece de las hormonas necesarias para crecer adecuadamente y reproducirse; como resultado, será mucho más corta que la masculina y carecerá de un desarrollo ovárico adecuado. El término oficial para esta condición es el síndrome de Turner. Es bastante raro y afecta a muy pocos pares de gemelos.