El movimiento axial se refiere a un elemento de la danza en el que los bailarines se mantienen anclados a un solo lugar por una parte del cuerpo mientras usan el espacio disponible en cualquier dirección. Gesticulando, subiendo, girando y girando.
Los movimientos axiales tienden a involucrar a la columna vertebral como el punto focal. En lugar de moverse de un lugar a otro en el escenario, los bailarines confían en el espacio que se les da para realizar movimientos. El spinning es un excelente ejemplo de movimiento axial, ya que el bailarín se planta en el suelo mientras se mueve en su lugar. La parte del cuerpo conectada al piso puede ser un pie, pierna, rodilla, mano, codo, espalda o cabeza. Los movimientos involucran brazos, caderas, rodillas, cabeza y cuello.
A veces, el movimiento axial se realiza entre dos bailarines, ya que el punto de movimiento está en otra persona en lugar del piso. Un bailarín puede usar un brazo o la mano de otra persona como punto de anclaje y realizar movimientos en su lugar. Los movimientos axiales se pueden realizar incluso en aparatos tales como postes, barras, escalones y escaleras. Cualquier base estacionaria funciona para el movimiento axial como elemento de baile.
Los movimientos axiales requieren flexibilidad, alineación adecuada del esqueleto, agilidad, coordinación y destreza fina.