Después de consumir bebidas o alimentos azucarados, una persona puede sentir náuseas debido a un aumento en los niveles de glucosa en la sangre. La glucosa en la sangre alta es más conocida técnicamente como hiperglicemia, según la Asociación Americana de Diabetes.
Muchos creen que una sensación de náusea después de comer azúcar es el resultado de un exceso de comida. Sin embargo, hay una explicación biológica más detallada de la inquietud que sigue al consumo de azúcar. El consumo excesivo de azúcar puede aumentar los niveles de ácidos tóxicos, como las cetonas, en todo el cuerpo, señala Mayo Clinic. Son estos ácidos los que causan la náusea.
Los alimentos azucarados aumentan los niveles de glucosa en la sangre en el cuerpo. Como respuesta, el cuerpo intenta restaurar estos niveles de glucosa a la normalidad. A lo largo de este proceso, hay síntomas no deseados de hiperglucemia, como micción frecuente, visión borrosa, fatiga y dolor de cabeza, afirma la Clínica Mayo. En algunos casos, el individuo que consume el azúcar puede tener una intolerancia.
En última instancia, comer alimentos azucarados hace que el nivel de glucosa en la sangre del cuerpo aumente. Este pico desencadena una respuesta que resulta en múltiples sentimientos no deseados. Los ácidos tóxicos también se producen a medida que aumentan los niveles de azúcar en la sangre, y estos ácidos son responsables de la sensación de malestar, explica la Clínica Mayo. Dado que los niveles de glucosa en la sangre fluctúan constantemente, es importante comprender el impacto del consumo de azúcar.