Los resultados de la investigación proporcionan resultados contradictorios en cuanto a si los refrescos de dieta causan aumento de peso o no, observa NBC. En un estudio de 2015 publicado en el Journal of the American Geriatrics Society, los investigadores descubrieron que las personas que no tomaban refrescos de dieta aumentaban 0,8 pulgadas alrededor de sus cinturas, mientras que las personas que consumían refrescos de dieta aumentaban 3,2 pulgadas, informa Time. En un estudio de 2014 patrocinado por la industria, las personas que bebieron refrescos de dieta perdieron un 44 por ciento más de peso que las personas del grupo de control, afirma Healthline.
Los científicos que creen que los refrescos de dieta causan aumento de peso no saben por qué sucede, señala Time. Ellos teorizan que los edulcorantes artificiales confunden el vínculo del cerebro entre la dulzura y las calorías. Los edulcorantes artificiales también pueden causar más antojos de dulces. La investigación sugiere que los edulcorantes artificiales pueden afectar a las bacterias intestinales y llevar a condiciones que causan el aumento de peso, como la intolerancia a la glucosa y la resistencia a la insulina. Otros estudios indican que los edulcorantes artificiales pueden inhibir la leptina, que es la hormona que evita que el cuerpo sienta hambre.
Algunas investigaciones sugieren que tomar refrescos de dieta como parte de una dieta y un plan de ejercicio no previene la pérdida de peso, de acuerdo con Healthline. Aún así, los profesionales médicos advierten a las personas que toman refrescos de dieta para practicar la moderación. También deben saber que los edulcorantes artificiales pueden hacer que sea más fácil comerlos en exceso, señala Health. Si la gente piensa que consumir bebidas dietéticas como una forma de conservar calorías, puede comer en exceso en otras áreas de sus vidas.