La maleabilidad es una propiedad física intensiva, ya que la maleabilidad de una muestra no depende de la cantidad de sustancia presente. La maleabilidad se refiere a la facilidad con que una sustancia se puede aplanar en láminas delgadas. Por ejemplo, una gran cantidad de oro sería tan maleable como una pequeña cantidad.
Las propiedades intensivas son aquellas que no cambian, independientemente de la cantidad de material presente. Por el contrario, las propiedades extensivas son aquellas que dependen de la cantidad de una sustancia presente. El color, la densidad y las propiedades químicas son ejemplos de propiedades intensivas, ya que permanecen igual independientemente de la cantidad de muestra. La masa, la longitud y el volumen son propiedades extensivas, ya que pueden modificarse eliminando parte de (o agregando a) la cantidad de la muestra.