Los primeros síntomas de insuficiencia hepática son diarrea, náuseas, fatiga y pérdida de apetito, según WebMD. A medida que avanza la insuficiencia hepática, comienzan a aparecer peores síntomas, que incluyen sangrado con facilidad, desorientación y confusión, y en casos extremos, coma.
La insuficiencia hepática ocurre en cualquier caso en el que grandes cantidades de hígado se dañan hasta el punto en que ya no puede funcionar, explica WebMD. La insuficiencia hepática puede ocurrir en cuestión de días, o puede ocurrir durante varios meses o años, lo que dificulta cada vez más determinar cuándo está ocurriendo. Hay varias causas de insuficiencia hepática, que incluyen hepatitis; reacciones adversas a la medicación; ingestión de sustancias venenosas, como los hongos silvestres; desnutrición; y el consumo de alcohol durante un período prolongado de tiempo.
Los síntomas tempranos de insuficiencia hepática a menudo están relacionados con varias otras afecciones, lo que dificulta la identificación del hígado como la causa, señala WebMD. En el caso de que los primeros síntomas, como una combinación de náuseas, fatiga y diarrea, ocurran simultáneamente, la persona debe buscar atención médica de inmediato, ya que la causa puede ser la insuficiencia hepática.
Un síntoma que se relaciona notablemente con la insuficiencia hepática es la ictericia, afirma la Clínica Mayo. La ictericia es el proceso en el cual la piel y los ojos comienzan a ponerse amarillos. Este síntoma es una clara señal de que el hígado está fallando y la persona necesita buscar atención médica lo más rápido posible.