El fosfato dicálcico, también conocido como sales de fosfato o ginseng americano, puede causar insomnio, diarrea, picazón y dolores de cabeza en algunas personas, según WebMD. En casos raros, una persona puede sufrir daño hepático o tener una reacción alérgica grave al suplemento.
Las sales de fosfato pueden causar un ritmo cardíaco rápido, así como un aumento o disminución de la presión arterial, afirma WebMD. Las mujeres pueden experimentar sensibilidad en los senos o sangrado vaginal. Es importante evitar tomar el ginseng americano durante el embarazo, ya que se ha relacionado con defectos de nacimiento.
El ginseng americano puede disminuir los niveles de azúcar en la sangre, por lo tanto, los pacientes diabéticos deben controlar los niveles de azúcar en la sangre de manera regular, y el suplemento debe suspenderse al menos dos semanas antes de cualquier cirugía, explica WebMD. El ginseng americano actúa como el estrógeno si contiene ginsenósidos, y puede ser perjudicial para las personas a quienes se les ha diagnosticado ciertos tipos de cáncer, como el cáncer de mama o el cáncer de ovario.
Aquellos que han sido diagnosticados con esquizofrenia pueden agitarse o sufrir de insomnio cuando toman grandes cantidades de sales de fosfato, señala WebMD. Los pacientes que toman la droga llamada warfarina, también conocida como Coumadin, deben evitar el ginseng americano. La interacción entre los dos medicamentos hace que la warfarina disminuya su eficacia y puede conducir a la coagulación.