Según la BBC, un endosqueleto es una estructura ósea ubicada en el interior de un animal y un exoesqueleto es una estructura ósea ubicada en el exterior de un animal. Cada tipo de esqueleto tiene ventajas únicas y desventajas en ayudar al animal a sobrevivir.
Algunos animales, como las medusas y los gusanos, no tienen un esqueleto. Sus cuerpos, por lo tanto, son más susceptibles al daño de los depredadores o del medio ambiente. Los esqueletos pueden ser internos o externos y ayudan en funciones como el movimiento y el desarrollo muscular. Endoskeletons existen en el interior de un animal. Son menos protectores que los exoesqueletos, pero son capaces de soportar pesos y tamaños pesados sin dejar de ser livianos. Otra ventaja de los endosqueletos es que crecen a medida que el organismo crece de tamaño. Un animal con un endoesqueleto nunca tiene que someterse a la muda o al desprendimiento de huesos. Los humanos, los perros y los peces son ejemplos de animales con endoesqueletos.
Los exoesqueletos existen en el exterior de un animal. Este esqueleto sirve como un revestimiento exterior duro que ayuda a proteger al animal de los depredadores y el medio ambiente. Este recubrimiento exterior está hecho de una sustancia duradera llamada quitina. El exoesqueleto cubre los músculos y el tejido blando del animal, lo que proporciona un mejor apalancamiento para el movimiento muscular. Sin embargo, a medida que el animal aumenta de tamaño, el exoesqueleto se vuelve demasiado pesado y restringe el crecimiento. Por lo tanto, el exoesqueleto debe ser arrojado y volver a crecer. Este proceso de muda tiene lugar varias veces a lo largo de la vida del animal. Los insectos, crustáceos y arácnidos son ejemplos de animales con exoesqueletos.