Los barómetros miden la presión del aire para ayudar a predecir el clima y determinar la altitud de un avión. Los barómetros de mercurio miden la presión cuando el aire presiona una cisterna de mercurio, cambiando la altura de una columna de mercurio que se extiende a través de un vacío en un tubo de vidrio. Los barómetros aneroides miden la presión de aire directa en un diafragma flexible y son menos precisos que los barómetros de mercurio.
Los meteorólogos utilizan barómetros de mercurio para observar las tendencias en los cambios de presión del aire. El barómetro consiste en un tubo de ensayo angosto y lleno de vacío invertido en un recipiente más amplio de mercurio. La atmósfera empuja hacia abajo el mercurio expuesto en el plato más ancho. Esta fuerza empuja el mercurio hacia el vacío en el tubo estrecho. A medida que cambia la fuerza, cambia la altura del mercurio en el tubo. Los meteorólogos miden la fuerza de la presión leyendo una escala en el lado del tubo de vidrio.
Los barómetros aneroides son más portátiles que los barómetros de mercurio. Esto los convierte en la herramienta preferida para la predicción del tiempo en el hogar y para medir la altitud en aviones. El dispositivo consiste en un cilindro que contiene un vacío parcial. El cilindro tiene una parte superior flexible que se mueve hacia arriba y hacia abajo a través del vacío parcial en respuesta a los cambios de presión del aire. Una aguja descansa sobre la superficie flexible y transfiere los cambios de presión a un puntero que mide la presión en un dial integrado.
