Aunque es imposible estar embarazada si está menstruando, muchas mujeres tienen un sangrado leve durante el embarazo, especialmente durante el primer trimestre. Este sangrado puede confundirse con un período menstrual. Una causa común de sangrado durante el primer trimestre es el sangrado de implantación.
De acuerdo con la Clínica Mayo, el sangrado de implantación ocurre cuando el óvulo fertilizado se adhiere al revestimiento del útero y puede ocurrir alrededor del momento en que las mujeres esperan su próximo período. Este sangrado generalmente es leve y muchas veces pasa desapercibido. En otros casos, puede ser lo suficientemente pesado como para ser confundido por un período. El sangrado de implantación generalmente se resuelve solo y no requiere ningún tratamiento.
En general, el sangrado vaginal durante el primer trimestre no es motivo de preocupación. Sin embargo, para las personas que experimentan sangrado que persiste o empeora, coágulos o tejido que pasa de la vagina, cólicos o dolores de espalda, o fiebre y escalofríos, deben comunicarse con su proveedor de atención médica de inmediato. Estos síntomas pueden ser un signo de un embarazo ectópico, una infección o un aborto inminente. A medida que el embarazo avanza hacia el segundo y tercer trimestres, cualquier señal de sangrado, incluso un sangrado leve, puede ser motivo de preocupación, por lo que es importante que las mujeres informen a sus médicos lo antes posible.