Las personas no necesariamente queman más calorías cuando luchan contra el resfriado común a menos que haya fiebre, según Scientific American. Las fiebres aumentan la temperatura corporal, lo que aumenta el metabolismo para quemar más calorías.
"La fiebre es un método natural para que el sistema inmunológico combata la infección", explica Scientific American. Cuando el cuerpo lucha contra un resfriado y hay fiebre, a medida que aumenta la temperatura, aumenta la demanda de energía. Por esta razón, la ingesta de alimentos y líquidos a menudo se recomienda como tratamiento porque el exceso de calorías se quema naturalmente. La ingesta de alimentos saludables es útil para reemplazar la pérdida de calorías y mantener un nivel de energía saludable porque el cuerpo convierte rápidamente los alimentos digeridos en energía. La ingesta de líquidos también es crucial ya que la fiebre deshidrata el sistema del cuerpo debido al aumento de la sudoración con una temperatura elevada. Reemplazar los líquidos perdidos ayuda a prevenir la deshidratación y reemplaza las calorías quemadas debido a la fiebre.Comer más calorías mientras se combate un resfriado con fiebre también ayuda a generar calor dentro del cuerpo y repone las calorías perdidas debido a la infección. El cuerpo convierte naturalmente la energía almacenada en grasa para mantener el calor, pero se recomienda usar ropa adicional o cubrirse con mantas hasta que la infección haya curado, según Scientific American.