Las especies pioneras son especies que recolonizan un área después de que el ecosistema haya sufrido daños o alteraciones. Estos tipos de plantas son normalmente plantas resistentes que necesitan muy poco para sobrevivir, como el liquen o las plantas con Raíces muy largas que les dan un mejor acceso a los nutrientes.
Las plantas pioneras también tienen semillas que pueden permanecer inactivas durante largos períodos de tiempo, esperando que las condiciones mejoren antes de crecer. Las malezas son una planta pionera común y pueden crecer rápidamente para llenar el área dañada. Estas plantas pioneras a menudo mueren y crean desechos vegetales que ayudan a aumentar los nutrientes disponibles para las plantas que crecerán durante la sucesión secundaria.
