La extracción, destilación, recristalización y cromatografía son diferentes métodos químicos de separación. La extracción es útil para separar compuestos con diferentes polaridades, y la destilación se usa comúnmente para purificar líquidos. La recristalización se usa para purificar sólidos, y la cromatografía se usa para separar compuestos y mezclas.
En la extracción, se utiliza una mezcla de un disolvente polar y un disolvente no polar en un compuesto. Cada disolvente disuelve una parte diferente del compuesto. Al separar cada fase de disolución y luego permitir que los solventes se evaporen, las diferentes partes del compuesto se separan limpiamente. La extracción se utiliza para eliminar los solutos de los sólidos.
La destilación separa los compuestos de los líquidos a través de un proceso de ebullición. Los vapores que escapan del líquido en ebullición se recolectan, y los compuestos con un punto de ebullición más bajo se separan de aquellos con un punto de ebullición más alto.
A través del proceso de cristalización, los sólidos se disuelven en una muestra caliente de solvente. La solución se enfría luego hasta que parte de ella cristaliza. A medida que este proceso se repite, la muestra se vuelve más pura.
La cromatografía, desarrollada por el botánico ruso Mikhail Tsvet en 1906, se utilizó por primera vez en plantas para separar pigmentos de colores. En cromatografía, un gas o líquido fluye sobre un sólido. Los compuestos con una afinidad por el solvente se eliminan fácilmente, mientras que aquellos con una afinidad por el sólido se mueven más lentamente.
