La hipótesis del protoplaneta dice que los sistemas solares tienen su origen en discos giratorios de polvo cubierto de hielo por gases congelados, que crecen lentamente en planetas. Los primeros cuerpos de polvo y gas se unen por encuentro por gravedad Otros, cuerpos más pequeños y los añadimos a su masa.
De acuerdo con la hipótesis del protoplaneta, los planetas que se forman más lejos de la estrella en formación tienden a ser más grandes porque el calor del sol evapora los gases más cerca de ella, reduciendo la masa de los cuerpos en formación. La mayor masa permite que los planetas más grandes acumulen la masa más rápido debido a su mayor atracción gravitacional. Los planetas rocosos hacia el interior de los sistemas solares tienen mucho menos hidrógeno y otros gases en sus composiciones.