Entre la corteza cerebral y el cerebro medio hay una masa de doble lóbulo llamada tálamo. Esta masa controla la percepción sensorial, el movimiento y la conciencia. Un golpe talámico izquierdo ocurre cuando el suministro de sangre se corta en el lado izquierdo del tálamo. Esto afecta el lado opuesto del cuerpo.
Los accidentes cerebrovasculares en el tálamo ocurren más en personas jóvenes, generalmente en fumadores. Las personas mayores que tienen estos accidentes cerebrovasculares suelen tener un historial de aterosclerosis, que es un endurecimiento o estrechamiento de las arterias. Un pequeño golpe en esta región a veces causa pérdida de sensación en el lado opuesto del cuerpo. Sin embargo, si se produce un accidente cerebrovascular más grande que involucre el tálamo y las partes adyacentes del cerebro, a veces se produce una parálisis o un debilitamiento.
La recuperación de estos efectos generalmente ocurre con el tiempo. En algunos casos también se produce un síndrome de dolor en estos pacientes. El dolor varía de leve a severo. Aunque algunos se recuperan de esta afección, para muchos el síndrome de dolor es permanente.
Las señales de advertencia de un derrame cerebral incluyen entumecimiento inexplicable, especialmente en un lado del cuerpo; problemas para entender a las personas cuando hablan; problemas para responder o hablar; marearse o tener problemas para mantener el equilibrio; y un repentino y severo dolor de cabeza. Si se presentan estos síntomas, es importante ponerse en contacto con un profesional médico lo más rápido posible. La detección temprana y el tratamiento aumentan las posibilidades de recuperación.