Captura-recuperación es un método de toma de censos que los biólogos utilizan para medir la actividad entre las poblaciones de aves, peces e insectos. La forma más simple es el modelo de dos muestras, que se utiliza para estimar el tamaño de una población.
En el método de dos muestras, se captura una muestra aleatoria de vida silvestre. Los sujetos se cuentan y se etiquetan para su posterior identificación y luego se liberan. Dado un escenario ideal donde no hay perturbaciones naturales, biológicas o relacionadas con los humanos en la población, más tarde se captura otra muestra de la misma especie. Sobre la base del número de sujetos recurrentes tomados en la muestra, se puede obtener una estimación de la población actual.
El método de captura-recaptura es examinado por algunos por ser poco confiable y por tener demasiados factores que contribuyen al resultado. Las inquietudes planteadas involucran si una muestra se toma durante la estación migratoria o si la especie vive en un área aislada sin la participación de otras especies que pueda afectar el crecimiento de la población. Otra preocupación subyacente es que no puede haber nacimientos o muertes en un período de muestreo que pueda afectar el resultado de la encuesta. Los métodos más modernos de captura-recuperación permiten realizar pruebas dadas estas disposiciones y tienen en cuenta el cambio de la población y la "capacidad de captura" o sujetos individuales.